En el nombre de Alá, el Misericordioso el Compasivo
Alabado sea Alá, lo elogiamos y en Él nos refugiamos, a Él le pedimos que nos perdone y guíe, nos refugiamos en Él del mal de nuestros seres y de nuestras obras, a quien Alá guíe; nadie lo podrá extraviar, y a quien Alá extravíe nadie lo podrá guiar. Doy testimonio que nada ni nadie tiene el derecho de ser adorado excepto Alá, Único, sin asociados, y doy testimonio que Muhammad es Su siervo y Mensajero, enviado antes de la Hora, albriciador y amonestador, invitador hacia Alá con su permiso, como una luz esplendorosa y radiante, que la paz y la misericordia de Alá sean con él, con su familia y seguidores hasta el Día Final.
¡Oh, creyentes! Temed a Alá como es debido y no muráis sino como musulmanes.
¡Oh, hombres! Temed a vuestro Señor Quien os ha creado a partir de un solo ser, del que creó a su esposa e hizo descender de ambos muchos hombres y mujeres. Temed a Alá, en Cuyo nombre os reclamáis vuestros derechos, y respetad los lazos de parentesco. Por cierto que Alá os observa.
¡Oh, creyentes! Temed a Alá, y hablad sólo con fundamento. Él hará prosperar vuestras obras, y os perdonará vuestros pecados. Sabed que quien obedece a Alá y a Su Mensajero obtendrá un triunfo grandioso.
¡Hermanos en la Fe! Hay una característica y atributo que embellece a los devotos y siervos de Alá, a los justos, rectos y guiados, característica propia de los piadosos, en realidad se trata del amor y la hermandad por Alá y la religión, la hermandad basada en la fe, fundamentada en los versos y ordenes del Corán, consolidada por el Mensajero de Alá -que la paz y las bendiciones de Alá sean con él- , dirigiéndose hacia ella la gente que en verdad reflexiona, conduciéndose paso a paso hacia al Paraíso y la complacencia de Alá, es el amor por Alá, amor por el que el Profeta -que la paz y las bendiciones de Alá sean con él- le juró a uno de sus compañeros, en un hadiz auténtico se narra que el Profeta -que la paz y las bendiciones de Alá sean con él- tomó a Muad de la mano y le dijo: “Muad, por Alá que te quiero, por lo tanto nunca olvides recitar después de cada oración, 'Oh Alá! Ayúdame a recordarte, a darte las gracias y a rendirte culto en forma sincera´,
اللَّهُمَّ أَعِنِّي عَلَى ذِكْرِكَ وَشُكْرِكَ وَحُسْنِ عِبَادَتِك
Narrado por Ahmed con una auténtica cadena de transmición.
Bendición para quien quiere, para quien es querido. La hermandad por la fe y el amor basado en la gran legislación de la Shariah, es la hermandad con la que los corazones se tranquilizan, con la que Alá guía a su gente, purifica sus almas y limpia sus corazones.
Esta hermandad es la que inculcó el Profeta -que la paz y las bendiciones de Alá sean con él- en los corazones de sus grandes compañeros, de los emigrantes y los que los recibieron, grabando con ello grandes ejemplos de altruísmo y bondad, sus corazones se encontraban lejanos y con la gracia de Alá se volvieron cercanos, eran enemigos y se convirtieron en amigos:
Él es Quien unió vuestros corazones, y tú no habrías podido hacerlo aunque hubieras gastado todo lo que hay en la Tierra, pero Allah los unió [y reconcilió a los grupos divididos]. Ciertamente Él es Poderoso, Sabio. Corán 8:63.
Alá dirigió esos corazones hacia el amor, cambiándolos hacia los sentimientos puros y a la amistad sincera, después de haber sentido rencor y odio, hacia el cariño, la amistad y la pureza, Alabado sea Alá, por el día en que unió esos corazones, por el Día en el que el Elegido hermanó a los Muhayirin y a los Ansar (a los emigrantes de Meca, con la gente de Medina).
Esa hermandad es la que cargó el Mensaje de esta Comunidad generación tras generación, amistad, amigabilidad y hermandad, el dolerse por el sufirmiento que le acontece a nuestros hermanos, sentir sus sentimientos, preocuparse por sus problemas.
Esta es la hermandad que el Profeta describió como un solo cuerpo, que si alguna parte de él siente dolor, le afecta a todo el cuerpo ya sea con fiebre o con aflicción, cuantos ojos de los musulmanes se afligen por el dolor de sus hermanos, cuantos corazones a veces no duermen por las aflicciones de los creyentes?.
Es la hermandad que siente el creyente por su hermano en obediencia hacia su Señor, porque por Alá que si tú abres tu corazón hacia el amor por Alá, Alá te amará, dado que un hadiz auténtico dijo el Profeta -que la paz sea con él:
(يقول الله تعالى: وَجَبت -ثَبَتَت واستقرت- محبتي للمتحابين فيَّ, وللمتجالسين فيّ, وللمتزاورين فيّ)
“Dice Alá el Altisímo: Mi amor es dispensado a quienes se quieren por mi causa, se visitan y cooperan entre sí.'”
Se otorgará cuando abras tu corazón hacia tu hermano por Alá, que mejor día y más honorable aquel donde el sol se oculte y Alá haya decretado su amor para ti, el día donde hayas salido para visitar a tu hermano y todos tus pasos se registren frente Alá, cuando invites a tu hermano a tu casa y recuerden a Alá, entonces Alá se complacerá de ustedes.
أقول قولي هذا....
El amor sincero y verdadero es cuando se hace solamente por buscando la faz de Alá, y este cariño tiene grandes beneficios que no se logran sino con condiciones establecidas e inculcadas por el Mensajero de Alá -que la paz y la misericordia de Alá sean con él-.
Primero:
Que tu acto sea sincero para Alá, que abras tu corazón sintiendo que Alá te ve y escucha, que no seas amable con alguien solamente por su dinero o por su procedencia, por su apariencia o por su familia, sino solamente porque buscas agradar a Alá, que quieras a los musulmanes aún estén lejos de ti, no importando sus colores o posiciones, su fama o grandeza, ya que no hay favor en nadie sino por su piedad. Ese es el amor sincero para Alá, esta es una obra que viene del corazón y debe de existir en cada uno de nosotros hacia nuestros hermanos.
Si has sido sincero en tu afecto que solo haya sido por Alá -glorificado y exaltado sea- debes saber que el amor por Alá tiene características y entre la mejor de ellas es que sientas el afecto por alguien debido a sus buenas acciones, no por otra cosa, que quieras a tu hermano por su reoratorio de Alá, por su temor a él, por que reza, que si lo ves realizando la inclinación en la oración te de gusto que está obedeciendo a tu Señor, al verlo ayunar, o dando caridad, al leer Corán. Debido a esto a la gente que más debemos respetar y amar es a la gente piadosa y entre ellos a los eruditos de nuestra religión, a los propagadores de ella, porque ellos tratan de obedecer a Alá y se dedican a él, el amor a los Ulema y a los piadosos es una característica de los verdaderos creyentes, cuando un hombre tiene un corazón sincero quiere a quien le enseña lo que dice Alá y Su Profeta, a quienes propagaron esta religión como los Sahabas.
En ellos vemos un gran ejemplo y sincero en su respeto al Profeta, cuando los Quraish en la batalla de Hudaibiah mandaron a un hombre para darles noticias del Profeta -la paz sea con él- y negociar con él pacto de Hudeibiah, este hombre regresó sorprendido por lo que había encontrado, cuando regreó le preguntaron ¿Qué es lo que viste? ¿Qué escuchaste? Y respondió:
"Estuve con Cosroes, el César y el Negus en sus respectivos reinos, pero jamás presencié a un rey entre su gente como Muhammad entre los suyos. Si realiza la ablución, no permiten que el agua llegue hasta el piso; si les habla, ellos bajan sus voces. No creo que lo abandonen por nada del mundo. Ahora quiere proponeros un acuerdo razonable, así que haced lo que os parezca".
Qué Alá este complacido de ellos, y los recompense con lo más elevado del Paraíso, eran los compañeros que quisieron al Profeta y fueron sus seguidores, los que les precedieron sabían de este sentimiento sincero y querían también a los compañeros del profeta Muhammad, no había uno de los seguidores de los Sahabas que no viera a uno de los eruditos entre ellos sin honrarlo por el gran amor hacia él por Alá.
El Imam Malik relata un informe con una auténtica cadena de transmición de Abu Idris Al Jaulani quien dijo:
“Entré a la mezquita de Damasco donde vi a un joven de brillante sonrisa, y vi a la gente que estaba reunida alrededor de él. Cuando disentían en alguna cuestión , se lo preguntaban y aceptaban su opinión. Yo pregunté quién era él y me dijeron: “Este es Muad Ibn Yabal.” Al día siguiente fui temprano a la mezquita, pero me encontré que él había llegado más temprano que yo. Él estaba orando, entonces lo esperé hasta que finalizó, luego me aproximé de frente y lo saludé diciendo: ¡Por Alá yo te quiero! Él me preguntó: ¿Por la causa de Alá? Yo respondí; Por la causa de Alá, entonces me sujetó llevándme hacia él y me dijo: 'Tengo buenas nuevas para ti. Escuché decir al Profeta -que la paz y la misericordia de Alá sean con él-: Alá dice: Mi amor es dispensado a quienes se quieren por mi causa, se visitan y cooperan entre sí.'
Este es el respeto que le mostraban a los Sahabas la generación que les precedía, les otorgaban su lugar y los querían, que Alá los recompense por todo lo que se esforzaron por esta religión.
Segundo –
Lo segundo que te dirigirá al amor por Alá, es un fruto de que te encamina hacia la obediencia y hacia la bondad, una característica que si se encuentra en el creyente hará que sea firme en la religión de Alá -glorificado Sea-, ¿saben cuál es esta característica la cuál el Profeta -la paz sea con él- la hizo un fundamento en la religión? Es la nasiha (el consejo) si quieres encontrar a un hermano veraz, vuelve hacia ese hermano que te aconseja, aquel que te habla de buena manera y se porta bien contigo, tratandote de sacar de la desobediencia y del pecado, cada vez ue te ve haciendo mal te recuerda a Alá y a Su Profeta, quien práctica lo dicho por el Profeta-la paz sea con él-:
(الدين النصيحة, الدين النصيحة, الدين النصيحة, قلنا: لمن يا رسول الله؟ قال: لله ولكتابه ولرسوله ولأئمة المسلمين وعامتهم)
La religión es el consejo, la religión es el consejo, la religión es el consejo.
Si ves a un hermano que te quiere sacar del fuego ese es el hermano veraz, aquél que busca la gananciando tratando con Alá.
وَالْعَصْرِ*إِنَّ الإِنْسَانَ لَفِي خُسْرٍ*إِلَّا الَّذِينَ آمَنُوا وَعَمِلُوا الصَّالِحَاتِ وَتَوَاصَوْا بِالْحَقِّ وَتَوَاصَوْا بِالصَّبْرِ
Creyeron, obraron y después aconsejaban, en la mayoría de las veces si escuchas a un hermano aconsejarte, has de saber que quiere el bien para ti, esta es una característica del amor por Alá.
Si quieres aconsejar a tu hermano tienes que tener en cuenta lo siguiente:
1.- Si lo aconsejas tienes que hacerlo solamente por Alá, saber que Alá te escucha y ve, que no haya en tu corazón sino Alá, saber que compras la misericordia de Alá por estas palabras, por Alá que no hay un solo consejo que salga del corazón sin que este afecte a quien se aconseja quiera o no, cuantos consejos sinceros no han beneficiado en el momento que se dicen pero se quedan grabados en el corazón, puede ser que aconsejes a tu hermano ahora y no te responda, puede ser que se burle o que te contradiga, pero al pasar los días y las horas Alá permite un momento donde ese consejo entre a su corazón, y por ello salga de su falta y habrás sido un motivo para que se salve del fuego y esto se contará en tu balanza de las acciones.
Pero también se debe de tener cuidado en no molestar con el consejo, De Ibn Mas´ud, que Allah esté complacido con él, que dijo:
El Profeta -la paz sea con él- solía tener consideración con nosotros al predicar (y exhortar) en el tiempo apropiado, pues temía aburrirnos con demasiados sermones y enseñanzas. Narrado por Bujari
Para aconsejar tienes que hacerlo en el momento adecuado, con las palabras adecuadas, para que así Alá te cuente entre los vencedores.
Tercero y último
Este es el grado más alto en el afecto por Alá, el grado de la plenitud, porque completas la religión con algo mundano, el ayudar a tu hermano cuando tiene un problema, que seas su mejor ayuda después de Alá exaltado sea, un hermano necesita de su hermano, a veces necesita dinero o quien lo saque de un apuro, cuántos han dado de su tiempo para ayudar a los demás, Alá eleva en grados a quien ayuda a los pobres de entre los musulmanes, a quien ayuda a las madres solteras de entre ellos, a los necesitados de entre sus hermanos creyentes, uno de los actos que más a la persona hacia su Señor es sacar de un apuro a su hermano musulmán, ganaté la recompensa si escuchas que tu hermano necesita dinero, apoyarlo con tu dinero si es que puedes, que tu dinero no sea para enaltecerte frente a tus hermanos, da de tu dinero buscando la faz de Alá, por Alá que si gastas por tu hermano habrá dos ángeles detrás de ti diciendo: (Oh Alá concédele a él algo mejor), (اللهم أعط منفقاً خلفاً) Narrado por Bujari y Muslim. Cuántos han ayudado a sus hermanos por Alá y han sido recompensados por este dinero, recompensados con hijos piadosos, recompensados con la reverencia a Alá en esta vida alcanzado bendiciones en la próxima.
La ganancia en este asunto está asegurada, cuántos hermanos hay que dicen quiero a los musulmanes, pero sabe que necesitan dinero y no hacen nada por ayudarlos, como puedes estar disfrutando ser feliz siendo adinerado y tu hermano esta preocupado, afligido y desolado.
Se cuenta que uno de los piadosos era adinerado y un día llegó a él un hombre no buscando ningún beneficio mundanal, -alguien que era una llave para el bien- no bino para beneficiarse de él, sino por sus hermanos musulmanes, y le dijo; pasa estoy el otro con una familia donde hay una mujer con sus hijos desolados, no tienen comida ni vestido ue los proteja del frío, entonces este llamó a quien se ocupaba de administrar sus bienes, y cuando fue por él, se esperó para cambiarse de ropa, a auna ropa que era ligera aún así con el frío que hacía, y le contó: se me ha dicho que hay unas personas en tal situación, y que con este frío no tienen que comer ni con que vestirse, “Ve con ellos y dales de comer y de vestir, y llenales sus manos de dinero, y yo me encontraré vestido así para sufir lo que ellos sufren hasta que regresen hacia mí.
Esos eran los corazones que sentían el dolor de sus hermanos musulmanes, no hay beneficio en tu dinero si no apoyas con él a los musulmanes, si no ayudas a tus hermanos que estén en apuros, que beneficio hay de los millones que se atesora, cuando tus manos están en ceros frente a la misericordia de Alá, -me refugio en Alá- de que te sirve si comercias con los demás pero no tratas con tu Señor, no tratas con Alá.
Si no tienes dinero por lo menos dale palabras de aliento, puede ser que tus palabras le ayuden y lo distraigan de su aflicción y pueda tener esperanza, es por ello que Alá prescribió visitar al enfermo, ir a los funerales, y dar el pésame a los familiares. Todo ello para que Alá fortaleciera el corazón de los creyentes, con las palabras a sus hermanos creyentes, y es por eso que uno debe dirigirse a sus hermanos con la hermandad, preferir a su hermano sobre sí mismo.
Dice Alá en el Corán
En verdad, los creyentes son hemanos.
نسأل الله العظيم رب العرش الكريم أن يَرْزُقَنا الحب فيه, والولاء فيه, اللهم إنا نسألك بأسمائك الحسنى وصفاتِك العلى أن تَجْعَلَنضا ممن وجبتْ محبتهم لك يا ذا الجلال والإكرام, اللهم إنا نسألك أن نحب بحبك من أحَبَك, وأن نعادي بعداوتك من عاداك, وأن تجعلنا سِلْماً لمن سالمت، وحَرْباً لمن حاربت, عوناً لأوليائك, حَرْباً على أعدائك, يا ذا الجلال والإكرام, سبحان ربِك ربِ العزة عما يصفون، وسلام على المرسلين, والحمد لله رب العالمين
Autor: Isa Rojas
Fuente: http://www.viveislam.org/
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